El embajador de Colombia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con sede en Roma, volverá al país para estar cerca al círculo de poder del presidente Petro. ¿Cuál es su objetivo? Tras la explosiva entrevista de Armando Benedetti hace un par de días en la Revista Semana, se conoció que el embajador renunciará oficialmente este lunes 25 de noviembre ante la Cancillería. Pero no se va del Gobierno. Pues llegará a ser asesor de Presidencia, al lado lado de Gustavo Petro y de Laura Sarabia, la directora del Dapre, de quien se rumora su salida desde hace varios días.
En concreto, según ha dicho Benedetti en algunos círculos, sería alto consejero presidencial. Los efectos políticos que este nombramiento podría generar empiezan en casa. Pues la relación de Sarabia con Benedetti está deteriorada. Ambos salieron del Gobierno el año pasado en medio del escándalo de unos audios revelados por Semana en los que se Benedetti grita iracundo a Sarabia y le hace reclamos y amenazas. Los audios, además de explosivos, son violentos contra una mujer. Este detalle no es menor porque Benedetti tiene un historial preocupante de presunto maltrato intrafamiliar a su esposa relacionado con un consumo problemático de alcohol y drogas, según ha reconocido él mismo.
